El Paso es mucho más que una parada fronteriza; es un destino lleno de sabor, cultura y paisajes impresionantes. Visitar esta ciudad es abrir la puerta a una experiencia auténtica y vibrante, donde la cocina innovadora y la riqueza cultural van de la mano.
Hospedaje elegante: Ubicado en uno de los hoteles más emblemáticos de la ciudad, Sabor at Hotel Paso del Norte combina la cocina internacional con toques fronterizos. Su carta incluye selectos cortes de carne e ingredientes mexicanos que cautivan a los paladares más exigentes. La decoración elegante y las vistas panorámicas lo convierten en el escenario perfecto para una cena que une lujo y autenticidad regional.
Brunch ideal: Para empezar el día con el pie derecho, Grove Brunch Cafe es el destino ideal. Este lugar encantador se especializa en platos ingeniosos, como waffles gourmet y bowls nutritivos, presentados con un estilo que invita a fotografiar cada creación. Su ambiente acogedor lo convierte en un punto de encuentro perfecto para turistas y locales en busca de un desayuno inolvidable.
Cocina fronteriza: Es el lugar perfecto para quienes disfrutan de un ambiente relajado sin sacrificar el sabor. Este restaurante moderno e informal destaca por su compromiso con ingredientes frescos y productores locales. Desde desayunos llenos de energía hasta cenas que sorprenden, Crave ofrece una propuesta que combina la cocina fronteriza con un toque cosmopolita que fascina a todos.
Cerveza artesanal: Es una joya para los amantes de la cerveza artesanal y la comida reconfortante. Este brew house ofrece una experiencia única, combinando cervezas propias con un menú que celebra los sabores de la región. Con un ambiente relajado y opciones creativas para maridar, Aurellia’s es el lugar perfecto para explorar la innovadora escena cervecera de El Paso.
Alta cocina y vino: Desde 1918, Cafe Central ha sido un ícono de la alta cocina en El Paso, ofreciendo platillos que mezclan técnicas europeas con ingredientes regionales. Su ambiente refinado y su extensa carta de vinos lo convierten en una parada obligatoria para los viajeros que buscan una experiencia de lujo. Con cortes de carne exquisitos y recetas de autor, este restaurante redefine la sofisticación en la frontera.
Actividades y naturaleza: Rodeada de paisajes desérticos y montañosos, esta ciudad ofrece actividades al aire libre como senderismo y ciclismo en el Franklin Mountains State Park. Su rica escena cultural incluye museos, galerías y espacios artísticos que complementan cualquier itinerario turístico. Además, los amantes de las compras pueden explorar tiendas locales y mercados que destacan la mezcla cultural de la frontera.