El periodo vacacional de Semana Santa y Semana de Pascua en México será todo un reto para la industria turística nacional en términos de prioridades, por que veremos si se optará por tener un fuerte control de los protocolos de seguridad e higiene para evitar la saturación de los destinos, o simplemente solo importará llenar hoteles y restaurantes al tope ignorando los lineamientos locales.
Toda la cadena productiva del sector está ávida de ingresos, eso no hay duda, pero se corre el riesgo de llegar más rápidamente a la inminente tercer ola de contagios de Covid-19 en México, y por consecuencia, a otro cierre de las actividades no prioritarias en todo el país, con su respectivo golpe al bolsillo de cada uno de los mexicanos.
La llegada de una tercera ola de contagios ya no es un temor del vox populi, si no que el mismo Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador -aunque sin hablar claramente como siempre-, lo tiene presente, como lo declaró el 21 de marzo pasado en la gira que tuvo por el estado de Oaxaca.
El Presidente indicó que si viene una tercera ola que “nos agarre vacunados a todos”. Sin embargo, no podemos dejar todo a la vacunación ya que hay dos pequeños detalles: uno, el ritmo de vacunación va lentísimo de acuerdo al calendario, ya que el gobierno que encabeza había prometido que todos los adultos mayores estarían vacunados en marzo de 2021, lo cual no se dio ni se dará. Y dos, la vacuna no previene el contagio, si no que disminuye el porcentaje de riesgo de muerte y/o síntomas graves.
Hay que tener presente que las probabilidades de contagiarse de Covid-19 siguen siendo más altas hoy que el año pasado, por el número de casos activos. De acuerdo con cifras de la Secretaría de Salud, el número de casos nuevos por día que se registraron el 21 de marzo de 2020 fue de 48, frente a los 2 mil 133 casos nuevos reportados el día de ayer. Así que el cubrebocas y la sana distancia, sigue y seguirá siendo las mejores armas contra el Covid-19.
Tome en cuenta que las vacaciones y las celebraciones decembrinas nos dejaron picos de contagios de hasta 22 mil 339 casos diarios, con mil 803 fallecimientos diarios como ocurrió el 21 de enero de 2021. Se imagina ¿qué podría pasar con una desbordada llegada de turistas a destinos turísticos? Sobre todo, si no se respeten los protocolos.
Como industria también hay que tomar parte de nuestras responsabilidades, y evitar casos como el ocurrido en Cancún, Quintana Roo en donde hubo un contagio masivo de 143 estudiantes argentinos -que celebraban su graduación-, los cuales tuvieron una prueba de antígenos negativa en México, pero positiva en Argentina. Y de acuerdo con declaraciones el contagio se originó en Cancún.
Aquí no solo falló la empresa operadora de viajes Moon Travel, que contrató a Laboratorios Marbú que proporcionó pruebas presuntamente falsas, según la Cofepris, si no que en el hotel y los antros, se les permitió a los chicos estar sin cubrebocas y sin las medidas de sana distancia, como lo mostraron innumerables fotografías que surgieron en redes sociales, y como fue denunciado por los mismos padres de familia.
Aquí el mensaje es que no pongamos en riesgo a nuestro propio cliente permitiéndole brincarse los protocolos, seamos conscientes de que tenemos que evitar los contagios entre los turistas, y los colaboradores, para preservar los negocios y evitar -en la medida de lo posible-, que una tercera ola de contagios ahogue el futuro del turismo.